¿Qué es un vinilo y como funciona?

Un disco de vinilo es un disco circular de policloruro de vinilo en el que se han creado unos surcos concéntricos sobre los que una aguja que se desplaza sobre los mismos es capaz de transmitir las vibraciones en impulsos eléctricos que se amplifican y se envían a los altavoces. Los altavoces, al recibir los impulsos eléctricos, mueven unos imanes internos que están conectados a unos conos que al vibrar expulsan el aire creando sonido.

La calidad de tus vinilos depende fundamentalmente, y de forma casi exclusiva, de la calidad de los archivos de sonido que utilices. El volumen de las canciones no guarda relación con el resultado de tu futuro vinilo. No dejes que tus másters alcancen el límite de saturación, esto no aporta ningún beneficio.
Cuanto menor sea el minutaje de una cara mayor puede ser el volumen y más amplios y dinámicos serán los audios.

La duración máxima que puede grabar en cada varía dependiendo del formato del vinilo (33r pm, 45 rpm) y del tamaño ( 7 pulgadas, 10 pulgadas ó 12 pulgadas).

Aceptamos archivos MP3 para la fabricación de tu vinilo personalizado siempre que estén en formato de tasa de bits constante (cbr) de 256 o 320 kbs, pero estamos obligados a convertirlos a formato WAV para poder insertarlos en el vinilo, esto puede provocar inevitablemente una alteración de las frecuencias. El motivo es que un archivo MP3 es una corrección informática del sonido para hacer el archivo más liviano y ocupar menos espacio, lo que provoca una reducción y deterioro de ciertas frecuencias. El sonido analógico es diferente del sonido digital, por eso el sonido del vinilo es diferente al de los soportes digitales.

Realizamos un pequeño ajuste en los graves, medios y agudos, así como una comprobación con diversos aparatos de medición antes del grabado y si es necesario, corregimos cada uno de tus archivos de sonido para que tengan una calidad óptima a la hora de reproducir tu vinilo.

Producimos tus archivos de sonido entre +3Db y –3Db dependiendo del minutaje que contenga cada cara. El nivel -3Db se utiliza principalmente en los vinilos de 12 pulgadas a 33 rpm y Maxi muy largos.

¿Cuánto mide un vinilo?

Hoy en día existen 3 tamaños de discos de vinilo.

  • El Single es el formato más pequeño. Es un disco de 7 pulgadas cuyo diámetro es de 17 cm. La capacidad estándar es de 5 minutos de música por cara a 45 rpm y de 7 minutos a 33 rpm.
  • El EP  o disco de 10 pulgadas, cuyo diámetro es de 25 cm minutos y en el que se pueden grabar hasta 15  minutos por cara a 33 rpm.
  • El LP es el disco más común de 12 pulgadas cuyo diámetro es de 30 cm y en el que se suelen poder grabar hasta 24 minutos de música por cara.

El minutaje que podemos grabar depende del tipo de música. Si por ejemplo hay mucha predominancia de graves, los surcos han de ser más anchos, por lo que caben menos surcos en la cara del vinilo y por lo tanto caben menos minutos de música. 

El grosor de los surcos es lo que permite introducir unas longitudes de onda más amplias, por lo que los sonidos que requieren mayores longitudes de onda, requieren surcos más anchos, limitando así el número de surcos y por lo tanto el minutaje.

¿Cómo se genera el audio para un vinilo?

Toda la información sonora está contenida en dos surcos: uno para el lado A, otro para el lado B. Nada más. Cada frecuencia está representada por un movimiento más o menos amplio que la aguja de lectura realizará cuando el disco gire sobre el tocadiscos: los graves ocupan mucho espacio, mientras que los agudos crean movimientos muy finos. Toda esta información está en una delgada línea dentro del surco que la aguja de reproducción va a esforzarse por seguir.

No todas las agujas tienen la misma calidad, por lo que no todas las agujas podrán realizar este trabajo con la misma efectividad a la hora de rastrear todos los detalles. Las agujas de muy alta gama (y muy caras) harán esto perfectamente bien, mientras que la gran mayoría de las agujas “rastrearán” el surco con un poco menos de precisión.

LA CUESTIÓN DE LOS GRAVES

Si los primeros discos de los años 50 tenían un nivel de graves muy pequeño, hoy es imposible imaginar una canción sin graves. Actualmente, el vinilo es capaz de reproducir unos graves muy profundos y potentes. Pero como físicamente ocupan mucho espacio, si su frecuencia es demasiado baja (menos de 50 Hz), obligarán a la aguja de lectura a realizar movimientos de gran amplitud dentro del surco, con el riesgo que se salga del mismo impidiendo la correcta reproducción, ya sea saltando o no llegando a poder leer correctamente las otras frecuencias, provocando distorsiones o errores de lectura.

Un efecto estéreo demasiado prolongado aumentará aún más el espacio necesario para grabarlos y reducirá el tiempo disponible en cada cara. Ajustando el estéreo sólo para determinadas frecuencias, podremos grabar más y con mejor renderizado. Por debajo de 300 Hz es preferible hacerlo en mono, por debajo de 150 Hz es imprescindible.

LA CUESTION DE LOS AGUDOS

Los medios y los agudos se reproducen muy bien en el disco, y es en esta banda de frecuencia donde se expresa la calidez del vinilo. Lo único que hay que considerar es que su mejor reproducción es al principio del disco, las pistas que se encuentran más alejadas del centro, donde la velocidad de reproducción es mayor. Para las últimas pistas, las que se graban más cerca del centro del vinilo, es recomendable elegir piezas más tranquilas, un poco menos ruidosas.

LA CUESTIÓN DE LA FASE

Otra particularidad importante es la de la fase. ¿Qué sucede cuando dos señales están “desfasadas”? La resultante se vuelve más débil, hasta el caso extremo en el que las señales pueden anularse entre sí. Esto hace que el surco se reduzca o incluso desaparezca. Por lo tanto, es imposible grabar señales fuera de fase. El problema es particularmente significativo en el extremo inferior del espectro, donde los cambios de fase pueden reducir drásticamente la profundidad del surco y nuevamente causar problemas de lectura.

Así que ten cuidado con las pistas de bombo, pistas de bajo o cualquier otro instrumento que toque el extremo inferior del espectro, para respetar la alineación de fase. Si es posible, evita el uso excesivo de procesadores de efectos o corrección psico acústica.

Consejos para generar el Master de Audio para un Vinilo

Cuando crees el archivo de audio para la fabricación de un vinilo, es preferible que no exceda de 0 a -0,5 Db y que no cruce el umbral de 50 Hz en los graves y el umbral de 16 KHz en los agudos.

  • Evita la compresión excesiva.
  • Evita el cambio de fase izquierda/derecha (correlación de fase) en los bajos, ponlo en mono si es posible.
  • Evita los efectos estéreo con demasiada amplitud (phasing, flanger) ya que corre el riesgo de causar efectos indeseables al escuchar y hacer que la aguja de lectura salte.
  • Verifica tu máster usando un corrector de fase —> se recomienda encarecidamente evitar valores negativos o valores cercanos a 180°.
  • Asegúrate de que tu máster no contenga cantidades excesivas de elementos en los rangos de frecuencia baja (alrededor de 50 Hz) y alta (alrededor de 16 000 Hz).
  • Las frecuencias más bajas (por debajo de 300 Hz) deben estar en fase, idealmente, en Mono.
  • Si tu grabación contiene elementos que difieren sustancialmente de los sonidos «naturales», la transcripción conlleva el riesgo de que se produzca una distorsión audible del sonido. La principal razón de esta distorsión se debe a las limitaciones mecánicas del proceso de grabado y puede provenir, por ejemplo, del uso de un corrector de tono para la voz (autotune, melodyne, etc.) o de efectos generados electrónicamente.

SOBRE EL VOLUMEN PROMEDIO DE TUS MEZCLAS (RMS)

Esto tiene poca importancia, ya que no será el mismo una vez registrado sobre vinilo. Es la duración de la grabación la que determinará el nivel final: cuanto más corto sea, más fuerte podrá sonar el disco. Si se han seguido los consejos e indicaciones que hemos expuesto anteriormente, el ingeniero responsable de grabar el vinilo podrá grabarlo a un volumen más alto.
Vistos bajo un microscopio, los surcos superpuestos crean problemas de lectura y saltos. Para grabar a un nivel alto, también debes reducir la duración de la grabación. Entonces habrá suficiente espacio para transcribir las modulaciones más fuertes.

Para un maxi 45 de 12″, el espacio disponible es el mismo que para un LP, a menudo para dos o tres títulos. Esto permite relajar las limitaciones de volumen o estéreo, a costa de menos tiempo disponible (7-11 minutos frente a 19-22 minutos).

Historia del vinilo

El disco de vinilo es el soporte de reproducción de audio más antiguo que existe. El origen se remonta a 1870, cuando Thomas Edison descubrió que si podía grabar los movimientos correctamente, también los podía reproducir y creó lo que conocemos como el fonógrafo,  que era un cilindro de cera sobre el que deslizaba una aguja que ejercía una gran presión.

En  la década de 1920 un grupo de ingenieros sustituyó el cilindro por un disco con surcos sobre los que deslizaba una aguja que era capaz de transmitir las pequeñas vibraciones en impulsos eléctricos. Pero no fue hasta 1948 que la compañía Columbia Records lo introdujo de forma industrial en el mercado de los Estados Unidos. Convirtiendo el vinilo en el soporte que todos conocemos. Es fácil de usar, viene en una gran variedad de colores y se puede reproducir sin problemas.

Gracias a la automatización en  el proceso de grabación y masterización, el disco de vinilo vuelve a ser un soporte que acapara muchas estanterías en las tiendas de discos y en todos nuestros hogares, convirtiéndose en uno de los productos más populares del mercado actual.

¿Cómo se fabrica un disco de vinilo?

En Duplicat fabricamos los discos en GZ Vinyl, qué es el mayor fabricante de discos de vinilo de Europa. GZ es el principal fabricante para compañías como Sony Records, Universal y Warner, ya que es el fabricante que mejor calidad de sonido obtiene en sus producciones.

El proceso se inicia con la generación del metal master, que es un disco de aluminio sobre el que se aplica una capa de laca de nitrocelulosa que al secarse forma una capa parecida a la del esmalte de uñas. Los discos resultantes son analizados para detectar pequeños defectos, descartando todos aquellos que presentan golpe, agujeros o motas de polvo. Los que no son rechazados se utilizaran como disco maestro o master para grabar en ellos el audio que el cliente nos ha enviado.

El metal master se coloca en la máquina de grabación donde una cortadora con punta de zafiro realiza los surcos en los que se graba el sonido. En GZ disponen de un software digital que permite a los ingenieros controlar en todo momento el proceso de corte y ajustar el grosor de los surcos si es necesario.

Una vez finaliza el proceso de corte, ya tenemos el metalmaster que servirá de molde para fabricar las copias, pero como la superficie de laca del metal máster es demasiado delicada para usarse en la fabricación, sólo se ha fabricado para servir de molde al verdadero metal máster que se utilizará en el proceso de prensado. Para ello se endurece mucho más rociándolo con cloruro de estaño y plata líquida que se adhieren sobre la laca.

El proceso continua sumergiendo el metal master, que ahora ya tiene un aspecto metálico, con la plata adherida en un baño con sustancias químicas. Mediante un proceso de electrólisis se fusionan la plata y el níquel presente en el baño y que se deposita en los surcos.

Una vez se sacan del baño, se separa la capa metálica de la superficie de la laca original obteniendo un disco metálico que es el negativo del que contenía la laca con el audio original. A este disco se le llama estamper y es el que se colocará en las prensas hidráulicas para fabricar las copias de los vinilos.

El proceso de prensado se inicia cuando las bolitas de policloruro de vinilo (que es el material del que están fabricados los vinilos) se vierten en la extrusionadora que los calienta y los convierte en una masa gomosa.

Las etiquetas que se adhieren en la cara A y la cara B se sitúan en ambos lados de la masa gomosa y todo el conjunto se sitúa en el interior de una prensa en la que ya están los estampers de la cara A y la cara B del disco. Se aplica una presión de unas 100 toneladas de forma que la masa gomosa se aplana y los estampers marcan los surcos sobre la superficie de policloruro de vinilo creando así el vinilo. El proceso de prensado y retoque (corte de los bordes irregulares) se realiza en unos 30 segundos.

¿Cómo limpiar un vinilo?

Para limpiar un disco de vinilo, sigue estos pasos:

  1. Limpia el polvo y la suciedad suavemente con un cepillo de cerdas suaves antes de reproducirlo.
  2. Utiliza un limpiador de vinilos líquido específico, siguiendo las instrucciones del fabricante.
  3. Aplica el limpiador con una esponja suave o un paño suave y limpio, trabajando desde el centro hacia afuera.
  4. Enjagua el disco con agua limpia y seca con un paño suave y limpio.
  5. Almacena el disco en un lugar fresco y seco, lejos de la luz directa y fuentes de calor.

Siguiendo estos pasos mantendrás tu vinilo en perfecto estado como el primer día a pesar de haberlo reproducido infinidad de veces.

¿Cómo enderezar un vinilo?

Enderezar un disco de vinilo doblado puede ser un desafío, pero hay algunos métodos que pueden ayudar a reducir la curvatura del disco. Sin embargo, tenga en cuenta que algunos discos pueden tener daños permanentes y no se pueden enderezar completamente.

Algunos métodos para enderezar un disco de vinilo incluyen:

  1. Calentar el disco con un secador de pelo: Coloca el disco sobre una superficie plana y calienta suavemente la curva con un secador de pelo a baja potencia. No lo calientes demasiado, ya que el calor excesivo puede dañar el disco.
  2. Poner el disco en un lugar fresco y húmedo: Pon el disco en un lugar fresco y húmedo, como un sótano o una despensa, durante unos días. La humedad puede ayudar a suavizar la curva del disco.
  3. Poner un peso sobre el disco: Coloca el disco sobre una superficie plana y ponga un peso sobre él, como un libro pesado. Dejarlo así durante unos días puede ayudar a enderezar la curva.
  4. Usar una tabla de planchar: Coloca el disco sobre una tabla de planchar con un paño húmedo debajo. Calienta la tabla de planchar y presione suavemente el disco con un paño húmedo sobre él.

Ten cuidado al utilizar cualquiera de estos métodos, ya que el calor excesivo o la presión pueden dañar el disco. Si no estas seguro de cómo enderezar el disco o si el disco está muy dañado, es mejor dejarlo a manos de un especialista.